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Santa Bárbara es un departamento de Honduras que destaca en gran manera dentro de los demás departamentos del país por la gran diversidad de atractivos que ofrece. Es gracias a ello que dicho departamento hoy en día se conoce como un lugar con un legado cultural muy importante para toda Honduras, siempre escondiendo pequeños rinconcitos encantadores en los cuales la magia de su belleza hechiza a cualquiera que los conozca. Santa Bárbara cuenta con diversos municipios que son de interés a nivel nacional por su infraestructura antigua y que se encuentran cerca de la naturaleza, uno de ellos es San Jose de Colinas.
San José de Colinas es un municipio muy interesante de Santa Bárbara, en el cual se pueden encontrar diferentes sitios turísticos, los cuales son ideales para ir a conocer ir y conectar con la naturaleza, es un no tan pequeño pero maravilloso pueblo del cual quedaras encantado de conocer si tienes la oportunidad. Su gente, sus costumbres, el estilo de vida y todo lo que le rodea lo hacen un lugar de ensueño en el cual puedes disfrutar de un agradable y saludable descanso mientras conoces nuestra propias raíces.
En este hermoso pueblito es posible respirar mucha paz y tranquilidad, gracias a su ubicación geográfica es posible ubicarla entre muchas montañas y pacificas colinas que le aportan una perfecta belleza natural la cual es ideal para que todo turista de origen nacional o de el extranjero puedan encontrar una conexión con la naturaleza así como disfrutar de preciosas caminatas en la naturaleza y observar fabulosos paisajes, dignos de una obra de arte al óleo.
Hay ciertos detalles que ni siquiera los mismo pobladores de San José de Colinas conocen y uno de ellos es el primer nombre con el que se le conoció al lugar de forma informal, el cual era “San Antonio” y luego el municipio se creó bajo el nombre de Nueva Florida de San José un 28 de enero de 1812. Ahora en la actualidad, el pueblo se conoce como San José de Colinas y tiene una extensión territorial de 2047 kilómetros cuadrados.
En este hermoso pueblito es posible respirar mucha paz y tranquilidad, gracias a su ubicación geográfica es posible ubicarla entre muchas montañas y pacificas colinas que le aportan una perfecta belleza natural la cual es ideal para que todo turista de origen nacional o de el extranjero puedan encontrar una conexión con la naturaleza así como disfrutar de preciosas caminatas en la naturaleza y observar fabulosos paisajes, dignos de una obra de arte al óleo.
Hay ciertos detalles que ni siquiera los mismo pobladores de San José de Colinas conocen y uno de ellos es el primer nombre con el que se le conoció al lugar de forma informal, el cual era “San Antonio” y luego el municipio se creó bajo el nombre de Nueva Florida de San José un 28 de enero de 1812. Ahora en la actualidad, el pueblo se conoce como San José de Colinas y tiene una extensión territorial de 2047 kilómetros cuadrados.
San José de Colinas es un pueblo con un estilo colonial que posee diversos encantos que ofrecer, entre los que destacan el parque Raúl Saldivar así como también una hermosa, muy antigua y majestuosa parroquia que está cercana a cumplir los 100 años de haber sido construida, en el 2030. Esta parroquia tiene una arquitectura colonial que ha recibido varias reparaciones a través de las décadas sin perder su esquema ni estructura. Además, el pueblo aún conserva su casco histórico lleno de casas antiguas, calles empedradas y recorridos tradicionales.
En este municipio también es posible encontrar El Mirador La Cruz, el cual se convierte en una parada obligatoria si andas de visita por allí, puesto que se trata del segundo más grande de Centro América, el cual te permite dar un espectacular vistazo a toda la zona en su máximo esplendor. También San José tiene la bendición de contar con diversos ríos y quebradas en los alrededores, balnearios y aguas termales. Hablando de su actividad económica, se dedican a la agricultura, cosecha y venta de café, el cual destaca de entre los de mejor calidad de toda Honduras por ser un café de altura, orgánico y de nivel de exportación.
En definitiva San José de Colinas es un pintoresco lugar que día a día cobra vida gracias los hermosos murales pintados en sus muros y a sus habitantes que día a día salen de sus casas para mantener viva la esencia de un pueblo trabajador que se esfuerzan por dar lo mejor de sí mismos en pro del beneficio de su comunidad.
Te invitamos a leer nuestro artículo sobre La Cueva del Diablo en Honduras.
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