Teófilo Trejo, un fiel representante de la cultural vocal de Honduras.

Como siempre decimos, Honduras es un país en el que abundan enormemente los personajes que han hecho algo importante para la historia de nuestro país y entre uno de esos personajes se encuentra el muy querido señor Teófilo Trejo, el autor de las famosas Perras de Teofilito, unos cuentos un tanto exagerados pero llenos de gracia que hacen una perfecta alusión a la cultura vocal y literaria que se practica en toda Honduras. Sus recuerdos así como sus cuentos perduran hasta la actualidad pues el Teofilito, desafortunadamente, ya pasó a mejor vida.

Nacido un 05 de marzo del año 1941, en la ciudad de La Lima, en el departamento de Cortés al norte de nuestra país, don Teófilo Trejo era un señor muy apreciado por la comunidad hondureña, la cual se identificaba mucho con la forma en la que contaba sus famosas perras, es más, a él se le adjudican las perras literarias de nuestro país. Sus libros Las Perras de Teofilito, Cuéntame Otra y Teofilito son los que han marcado la tradición oral de Honduras con su forma de expresión tan única y especial. Según comentaba don Trejo, existía una diferencia importante entre una perra y una mentira y no refiriéndose al hecho de que una perra es el femenino del animal perro sino de que Honduras esto también representa una cultura vocal marcada.

Un personaje con una imaginación única.

Para don Teófilo, sus perras son más que todo cuentos que señalaban una problemática social, son muy graciosos y hacen que la gente se distraiga fácilmente al escucharlos mientras que las mentiras para él significaban una práctica empleada especialmente por el sistema político del país para mantener sometido y engañado a todo el pueblo. La forma en la que Teófilo miraba el mundo en el que vivía era muy curioso y sus cuentos formaban parte de su máxima forma de expresión, leerlos o escucharlos hacia parecer que se leían datos increíbles o imposibles pero que a la vez tenían lógica y sobre todo mucha gracia.

Los inicios de este había cuentista no fueron para nada sencillos, tuvo una infancia verdaderamente complicada y a temprana edad tuvo que dejar sus estudios primarios para poder apoyar a su padre y sus cinco hermanos con el duro trabajo que se realizaba en los campos bananeros. Después de un tiempo, su vida toma un giro interesante cuando para alrededor del año 1971 don Trejo es elegido como presidente del patronato de su comunidad y además desarrollo diversas labores sociales en su sector. Entre algunas de esas labores también se encuentra el de ser el primer Secretario General de la Centra Nacional de Trabajadores del Campo, también fue secretario.

El ingenioso escritor siempre acostumbraba a escribir los cuentos que se le ocurrían en un pequeño cuaderno y afortunadamente estos llegaron a manos de la prestigiosa compañía Editorial Guaymuras, quienes creyeron que dichas historias eran merecidas de ser conocidas por todos y guardadas para la posteridad. Es así como las populares perras pasaron de ser unas simples historias compartidas entre amigos y familiares, a convertirse en autenticas historias que se volvieron parte importante de la literatura de nuestro amado país, llegando a ser compartidas a nivel internacional.

Definitivamente este personaje nació con el don para el cuento corto, su tenacidad y determinación lo llevo a vender sus libros de casa en casa hasta conseguir el reconocimiento que se merecía. Se convirtió en un importante líder campesino y por ocasiones predicador en la iglesia católica local. El hábil escritor de 75 años no se encuentra más con nosotros tras un desafortunado accidente, pero sus cuentos que relataban la vida diaria de personas comunes, llenas de gracia y costumbres hondureñas seguirán vivas.